LA FORJA DE ARMAS DIVINAS

En Astranaar no existe mayor artesano que Hartos, dios de la guerra y la artesanía, sus obras son tan únicas y magnificas que incluso el más inculto de los seres sabría reconocer una de sus maravillosas obras. Entre todas sus artefactos forjadas en la forja de luz perpetua de Ilumietar (un lugar de pura luz que es capaz de crear los más bellos y poderosos artilugios si unas manos maestras la usan) destacan las armas de los dioses.

Cuenta la leyenda que las armas que Hartos le fabricó a los dioses durante la Era del Vacío son a día de hoy las herramientas y armas más poderosas que se conocen en el mundo de Astranaar, y nadie nunca ha podido siquiera rivalizar con su poder. Entre esas armas se encuentran: Luz Incandescente de Lumien, Pyrarca de Arcanus, Raíz de Yseran, Solucionadora de Guerras de Hartos, Kamereon de Vulpex y Rompetierras de Talkros.

Las armas de los dioses, son descritas de miles de maneras distintas, hacedoras de cientos de hazañas diferentes, y conocidas por casi todos: historiadores, soldados, religiosos, mercenarios, busca tesoros... Pero a pesar de ser las armas más poderosas y famosas que Hartos forjó se cree que no fueron las únicas. Armas de menor calibre pero de inmenso poder comparados con el resto de creaciones mortales fueron creadas a petición de Lumien, antes del Pacto de Emancipación.

Según cuenta la leyenda, durante la Era del Renacimiento, Lumien tenia favoritos, criaturas mortales que apreciaba y tenia en estima, ya fuera por sus facultades, ideales o acciones. Lumien conmovido por la esencia de aquellos mortales le pidió a Hartos que fabricara objetos de gran poder que ayudaran a aquellos mortales a cumplir sus metas, que estaban relacionadas con el bien, la luz y la justicia.

Nadie sabe con exactitud cuantas armas se forjaron para los mortales, ni siquiera se sabe si esta leyenda es real o solo habladurías para despertar la curiosidad de los más aventureros, pero entre la leyenda pasada de generación en generación se habla de 5 poderosas armas que aún se encuentran en Astranaar, ocultas y escondidas a la espera de que un nuevo portador blanda su increíble poder.

Incluso entre las armas forjadas por Hartos se rumorea que una estaba destinada a Thelmon Tharimon y que gracias a su poder consiguió conquistar todo el mundo conocido durante la Era del Renacimiento. Entre las múltiples historias de las armas forjadas por los dioses se habla que la destinada a Thelmon Tharimon se encuentra en su tumba, o lo que debía ser su tumba antes de su ascensión como dios. Son muchos los aventureros que parten en busca de la "Tumba de Talkros", con la esperanza de que con su hallazgo encuentren un arma forjada por Hartos.

Las leyendas de tesoros increíbles y armas mágicas de poder inconmensurable vagan por todo Seltos de un lado a otro, muchas de ellas son mentiras, otras ocultan algo de verdad, pero lo único cierto de todas ellas es que son solo historias hasta que alguien demuestre lo contrario.