LA VIDA Y MUERTE EN ASTRANAAR

La vida así como la muerte está presente para todos los seres en Astranaar, pues es un ciclo por el que pasan. La vida esta considerada, por casi todos como un regalo, algo bendito por lo que deben luchar y dar gracias, mientras que la muerte como un inevitable final que lleva a dos sendas completamente distintas. Estas creencias varían según las ideologías y cultura, pero en esencia son las mismas.

El principal cambio que surge según la ideología y cultura de la criatura, es la creencia de como se llega a la bifurcación del más allá, siendo muy dispares las creencias sobre que valores o que formas de vivir son las correctas para ser capaz de acceder a los Salones de la Luz y evitar el eterno sufrimiento de las Cámaras del Vacío.

Los Salones de la Luz es un lugar acogedor donde todo es luz y armonía, y solo los justos que caminen en la senda de la luz pueden entrar. Allí la eternidad pasa en un instante, rodeado de todos los que te han querido y con todo lo que quieres al alcance de un solo pensamiento, un paraíso completamente personalizado y moldeable por uno mismo. Mientras que por otro lado se encuentran las Cámaras del Vació, un lugar devastador, violento y lleno de sufrimiento, donde los seres viles y corruptos acaban tras su muerte. Se trata de un sufrimiento sin fin donde se castiga a aquellos que han atentado contra la vida y esparcido al violencia, crueldad y muerte de forma voluntaria por el mundo.

A pesar del inevitable destino del Más Allá, no es el final, ya que en el universo las almas nunca mueren, solo se transforman, cambian y toman nuevas formas, en lo que se llama la Rueda de las Almas. La Rueda es como se denomina comúnmente a la reencarnación de las almas en nuevas criaturas, olvidando que fueron en sus anteriores vidas y dándoles otra oportunidad de vivir. No hay un criterio de reencarnación, nadie decide en que criatura te reencarnas, en que lugar o bajo que circunstancias, es completamente justo, imparcial y aleatorio. Lo único que queda claro es que la reencarnación la harás en un ser racional, con pensamiento propio y cierto nivel de inteligencia.

Solo las almas a las que todas las personas que la conocieron en vida han muerto, o que han pasado 5000 años desde su muerte tienen derecho a rencarnarse, las otras esperarán en los Salones de la Luz. Por otra parte se dice que un alma condenada a las Cámaras del Vacío si muestra arrepentimiento y no ha caído en la locura es capaz de libarse de su condena para acceder a los Salones de la Luz y volver a la Rueda de las Almas.

En el ciclo de las almas no solo se reutilizan las que ya existen, sino que también se crean nuevas almas, ya que no todas vuelven a rencarnarse, aunque el proceso por el cual se crea una nueva alma es completamente desconocido, los expertos afirman que es algo mucho más complejo y diferente con respecto a la reutilización de las que ya existen.

Tanto los Salones de la Luz como las Cámaras del Vacío son lugares muy diferentes entre si y cada uno tiene sus propias cualidades y formas, adaptadas a las almas que alberga.

LOS SALONES DE LA LUZ

LAS CÁMARAS DEL VACÍO