Los Planos Exteriores están conectados entre si, aunque no todos. Algunos de los planos están unidos por lo que se llama el Corredor Infinito o el Pasillo Onírico, una forma de viajar entre los Planos Exteriores que trasciende el espacio y el tiempo. Poco se sabe sobre el Corredor, pero a grandes rasgos se cree que es un gran laberinto lleno de cientos de miles de pasillos cambiantes que fluctúan y se mueven. No solo se mueven los corredores a una velocidad abismal, sino las criaturas que entran en el propio corredor también viajaran dentro del pasillo a grandes velocidades. No hay salidas preestablecidas y la única forma de salir del corredor es atravesar una pared de sus pasillos. Cuando una criatura atraviesa una de sus paredes aparecerá en otro plano, pero también puede aparecer en un lugar desprovisto de todo, donde no existe ni la materia ni el tiempo, un espacio ingrávido en el que las criaturas que entran están condenadas a vagar por él hasta el fin del multiverso, conocido como la Inmensidad.