La zona sur se encuentra más allá de las Islas Solitarias y se conoce por ser unas peligrosas aguas plagadas de inconvenientes climáticos donde muy pocas veces se puede ver el sol o las estrellas. El cielo de esta zona está totalmente encapotado por nubes tan negras como el carbón, que continuamente descargan lluvias incesantes y martillean las aguas con rayos como si de un martillo a un yunque se tratara, es como una gran tormenta eterna. Las aguas revueltas y los monstros marinos de las profundidades hacen de sus aguas un lugar muy peligroso. Muchos han intentado superar las tormentas e intentar ver que hay más allá, pero ningún barco ha regresado. Lo único que se ha encontrado han sido pequeños paramos de remanso y paz dentro de la eterna tormenta, como si de un ojo del huracán se tratara, pero lejos de ser lugares donde bajar la guardia, son los nidos o guaridas de criaturas marinas muy poderosas. No se sabe a ciencia cierta si esas áreas las provocan ellas, o si las encuentran y gracias a su fuerza las convierten en sus "hogares". Entre los marineros llaman a las tormentas eternas el "Abrazo de Talkros", debido a su dominio de la tempestad.